04 diciembre, 2011



Saph se impacientaba.
¿Por qué nadie ha puesto el árbol ya?
Se preguntó eso miles de veces aquella tarde de diciembre.
En su casa no habían luces de colores, ni pequeños regalos colgados de las paredes...
Definitivamente, su familia estaba perdiendo el espíritu navideño que tanto le gustaba.
No había rastros de paz y felicidad en su casa, ni tampoco unión familiar.
Desde pequeña, en esas fechas ya se estaba comiendo turrón bajo el árbol, sentados al lado de la chimenea. Pero ese año ni la madera estaba preparada.
Papá de viaje, mamá trabajando, Will con su novia...
Bajó las escaleras despacio, y contempló la sala de estar desde el último escalón.
Oscura, fría, sin decoraciones, y con la luz apagada. En un instante, volvió a subir los escalones deprisa.
Una gran idea cruzó su pequeña cabezita.
Aunque su familia no fuese a celebrar la Navidad... ¿por qué ella no?
Rápidamente cogió su bufanda de lana, junto a su gorro favorito. Se puso las botas, y en un santiamén atravesó la casa. El pompón de su gorro daba saltitos encima de su cabeza mientras daba vueltas buscando las llaves.
Se las metió en el bolsillo del chaquetón, junto al móvil, y salió sin hacer ruido alguno.
Fuera hacía muchísimo frío y se ajustó la bufanda para que le tapase su naricita sonrosada.
Recorrió las calles de la ciudad, todas nevadas y congeladas, buscando tiendas abiertas.

Closed. Closed. Closed.

Todas las tiendas tenían el mismo cartel.
"¿Qué voy a hacer?"
Se dijo, preocupada.
Aceleró el paso, mirando a la derecha y a la izquierda, hacia delante, y hacia atrás, observando todo tipo de detalles. Si seguían las cosas así, su plan no se iba a cumplir a tiempo.
En una pequeña calle, un resplandor de colores iluminaba una oscura esquina.
Una tienda escondida en un rincón, con luces por todos lados, y un arbolito en el escaparate.
Sapphire suspiró aliviada, solando una nubecita de vaho a través de su bufanda.
Cuando entró, unas campanitas sonaron. Recobró el aliento, y se acercó al dependiente, que se giró en cuanto la vió.

- ¿Le puedo ayudar en algo en particular, señorita?
- Bueno... estoy buscando adornos... navideños.
- Aquí tenemos todo lo que necesita, en el pasillo 4 podría haber cosas de su agrado. - Dijo aquel hombre mayor, con una sonrisa en la cara.

"Santa Claus is coming to town~"

Saph empezó a tararear la canción,
canando a trozitos la letra.

"Pasillo Cuatro... Pasillo Cuatro..."

Sin darse cuenta, se topó con alguien.
Alzó la vista: Un chico joven, bastante mono...
Ahora no sólo tenía la nariz roja, sino también las mejillas.
Sólo le hacían falta cua
tro patas para parecerse a Rudolf.
Bajó la vista de nuevo, y le susurró:

- ¿Pasillo cuatro... por favor?
- Ven por aquí, me llamo Dean. ¿Y tú?
- Yo... soy Sapphire... si quieres... llámame Saph...

Le tendió su mano, y los dos juntos fueron a buscar ese pasillo.
Una gran estantería con un cartel pegado a uno de sus lados, se extendía encima de ella. Llena de luces, peluches y todo tipo de cosas que dejarían con la boca abierta a todo el mundo.
Saph empezó a coger cosas de aquí y de allá, metiéndolas en una caja de cartón que había traído Dean.

- ¿No piensas que estás cogiendo demasiadas cosas? ¿Cómo de grande es tu árbol?
-Mmm... creo que... - Sapphire se puso de puntillas y señaló un peluche en una balda muy alta de la estantería - más o menos así...
- ¿Y no crees que necesitarás ayuda? Eres demasiado bajita, yo iré contigo, si me dejas, claro.

Saph asintió. El corazón le iba a mil... ¿Podría estar enamorándose de ese extraño? Apenas le conocía de una hora, pero había desarrollado unas emociones bastante fuertes hacia él. Recogió algunas guirnaldas plateadas y los dos juntos, salieron aquella fría noche de la tienda, sin imaginarse que podría pasar después.


Este cuentecito, se lo dedico a mi amiga escritora Maria, que sin la inspiración que me da, no sería capaz de escribir tanto :) Gracias a los lectores también, a ver si el número crece! Algún día publicaré lo que pasó entre Saph y Dean, pero de momento... shhh! es secreto!

4 comentarios:

  1. Me ha encantado!! Estoy deseando ver como acabara xD Muchisimas gracias por dedicarmelo:) Tienes que seguir escribiendo, eres genial xD

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  2. Omg, gracias cariño :333
    Me pongo colorada *sonrisa*
    Ya verás la pedazo de carta que te envié ❤
    De mientras estoy deseando ver más cosas tuyas!

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  3. Qué bonito! Un cueno navideño de tintes alegres :) Me encanta la foto, soy una fan de las bolas de nieve!

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  4. Gracias^^ comentarios como este me sacan sonrisas cada noche :D Y más de gente de fuera >w<

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Nubes~